La ausencia de daños visibles en un equipo electrónico sensible, podría interpretarse como que es inmune a transientes de sobrevoltaje y que no se requiere protección especial, por ser una inversión innecesaria. Esto podría ser un error, que podría generar importantes costos en tiempos muertos y mantenimiento. A pesar de que un equipo electrónico sensible siga operando de forma normal, no necesariamente significa que esté bien, podría haber sufrido una disminución en su rendimiento así como degradación de componentes internos, que eventualmente podrían provocar el fallo repentino del dispositivo.
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